Paté de color gris grafito bastante homogéneo. Tiene un sabor marcadamente especiado, dominado por el tahine negro (puré de sésamo negro). Su aroma recuerda al de algunos frutos secos como las pipas de girasol tostadas sin llegar a enmascarar la berenjena asada. Al degustarlo detectamos la riqueza de especias, como el comino, además de sus dos principales ingredientes antes citados.
Es un paté fuerte, intenso, de textura similar a los patés cárnicos.
*Procedente de agricultura ecológica.